Resulta bastante curioso que en los últimos años The Twilight Sad siempre hayan estado rodeados por un áurea de «eterna promesa«. A pesar de que la crítica siempre se ha visto seducida por sus composiciones, no han conseguido acabar de entrar en la escena mainstream, la cual abarca unos cuantos grupos revival con seguramente menos talento, pero que generan más simpatía entre el gran público. Robert Smith ha ejercido de padrino con los escoceses, incorporándolos a la mayoría de sus shows como teloneros por un lado, y citando que «en un mundo más justo, este grupo tendría mucho mayor reconocimiento» por el otro. Esta unión en los escenarios ha resultado tremendamente productiva para ambas partes: James Alexander Graham se ha convertido en un frontman más versátil y que ha incorporado nuevas ideas a sus composiciones. Su nuevo LP se ha cocinado a fuego lento a lo largo de más de 4 años y emerge rodeado de dificultades (la salida amistosa de Mark Devine, batería y uno de los fundadores originales entre ellas). A pesar de remar contra viento y marea, The Twilight Sad han conseguido fabricar su álbum más completo y directo hasta la fecha.
The Twilight Sad suenan más convincentes que Nunca
Y es que «It Won/T Be Like This All the Time» es un gran despliegue de arsenal en once canciones que recoge todos los elementos que hacen que el grupo brille. Los escoceses usan las emociones y sentimientos como la mayor de sus armas, alcanzando momentos realmente intensos. The Twilight Sad utilizan una bola de demolición para acabar con cualquier atisbo de ingrediente artificial, algo que consiguen ya en «[10 Reasons for Modern Drugs]» su apertura inicial. Pero a James Alexander Graham y compañía no les importa remangarse las camisas, apretarse bien fuerte los cinturones, y meter una marcha más en sus motos. Buena prueba de ello son «Shooting Dennis Shooting» o «Vtr«, los temas más enérgicos de todo el disco.
Pero los momentos en los que el grupo consigue destacar en mayor manera, son sin duda en los que tira de revival ochentero, pero llevado a los nuevos tiempos. Así, en»The Arbor» encontramos destellos de los Smiths más oscuros, y en «Sunday Day13» o «Videograms» nos preguntamos si The Cure sonarían así si hubieran decidido iniciar su andadura en los años 2000.
Esta convinción y saber hacer logra que The Twilight Sad se sientan intocables y lleven su música a una escala mayor. Puede que sea el momento de volar por cuenta propia y bajo la mirada de los grandes focos. Este verano podrás verlos en el Madcool y en el Doctor Music.
By : Daniel Santamaría