Por Ray Vegas y Juan Girón. Fotografías de Sara Cartas.

Había ganas de vivir la nueva edición del Mad Cool, o lo que es lo mismo, Mad Cool 2022. La quinta edición del festival aterrizaba con fuerza en la ciudad tras dos años sin poder celebrarse debido a la crisis del coronavirus. Una tormenta de granizo unas horas antes de la apertura de puertas de la jornada inicial hizo temer lo peor, pero por suerte paró a tiempo y el sol radiante apareció para quedarse desde el primer al último día.

Según datos de la organización, «más de 310.000 personas, un 36% internacional y un 64% nacional, han podido disfrutar de la experiencia Mad Cool durante los 5 días que han protagonizado este quinto aniversario«. Entre esas personas salieron a la luz diversos outfits, los más valientes vestían de riguroso negro, color a priori complicado teniendo en cuenta el hervidero en que se convierte Madrid en estas fechas. Hay un mítico tubo de pintura a la entrada (que resiste edición tras edición) cuyo contenido derretido y desbordante expresa bastante bien la sensación térmica.

Pero ahora hablemos de cómo el Mad Cool ha conseguido convertirse en un lugar donde cruzarte con el portero de tu casa, tu tía Pili, los Heavys del parque, los modernos de siempre y un largo catálogo de Pokémons (Guiris). Acostumbrados a una endogamia que se agudiza y genera crisis de identidad pasados los 30 es de agradecer la enorme variedad de gente que acude a este festival que no para de crecer. También es de agradecer la previsión de personal en barras y accesos, logrando no formar colas absurdas y pudiendo disfrutar de lo principal, la música.

Ahora sí, basta de preámbulos, no sabemos si queda mucho por contar, lo más seguro es que el pasado fin de semana te hayan frito el Instagram con Stories de The Killers, Metallica, Florence y un largo etcétera… pero si algo se puede añadir podrás leerlo en las próximas líneas.

 

Espacio general

Este año se notó una mayor capacidad en el recinto en cuanto a barras, baños o puestos de recarga de pulseras. No hubo apenas colas importantes en el interior, salvo en ocasiones puntuales. Stands de los distintos patrocinadores ofrecieron experiencias de todo tipo. Lejos de ser un impedimento para el disfrute, las bebidas frescas y revitalizantes tomaron un papel especialmente importante. Entre ellas Vibra Mahou, que montó una discoteca y Johnnie Walker, donde no pararon de servir copas durante las cinco jornadas de festival. La historia de cómo un pirata ligado al ron tras años de aventuras se pasó a whisky de la mano del delicioso Johnnie Walker… la dejaremos para otra ocasión.

imagine dragons mad cool

Fotografía de Imagine Dragons

 

Los puestos de comida fueron de los lugares más demandados, pero la amplia oferta permitía no esperar mucho hasta conseguir el manjar deseado. Las zonas VIP tampoco molestaron mucho, ya que su situación estaba lo bastante ladeada como para casi pasar desapercibidas.

Por último, la distribución de los 7 escenarios del recinto consiguió su misión: redistribuir al público de la manera más óptima posible. 

 

Transporte de ida y vuelta

El transporte es uno de los pocos aspectos a mejorar por la organización para el próximo año, cuando se muden al recinto recién anunciado en el sur de Madrid. Sí, era de esperar debido a la afluencia de personas y a pesar de la previsión de la organización con los autbouses lanzadera y la ampliación del horario de Metro. Mancha negra la gestión de los amigos de Uber, que como muestra de una ambición desbordante y una política de capitalismo salvaje decidieron cobrar entre 60-100€ a los valientes que se atrevieran a atravesar la ratonera absurda formada por guardias, policías y personal de reducido intelecto. En ocasiones como esta, si se le permite trabajar con las mismas condiciones, el sector del Taxi gana por goleada.

Ojo, también hubo los que consiguieron volver a sus hogares por un simbólico precio de 1,5€.

 

 

¿Y qué pasa con los conciertos? Pues que fue lo mejor del festival, como no podía ser de otra forma. Un total de 149 artistas nacionales e internacionales se dieron cita en el cartel del Mad Cool 2022 para ofrecer directos para la historia. Aquí van algunos de los momentos, sobre todo musicales, más recordados.

 

Algunos de los momentazos del Mad Cool 2022

 

  • Metallica, amos y señores del metal (Jornada del miércoles)

La inauguración del festival corrió a cargo de los legendarios Metallica. Más de 40 años sobre escenarios de todo el mundo y sus circunstancias les habían llevado allí, a actuar sobre las tablas de un escenario en Valdebebas city. Haber visto Stranger Things en las horas previas (los que hayan visto la serie lo entenderán) aumentaba las ganas de ver en directo a una de las mejores bandas de la historia. Y no defraudaron. Voz gruesa y en forma, solos kilométricos y ruido a camino entre el infierno y el cielo, acompañado de fuego (literalmente), para empezar por todo lo alto la nueva edición.

 

  • El lobby de las pegatinas y la purpurina le debe muchísimo dinero a EUPHORIA y Coachella (Todas las jornadas)

Lo que era algo anecdótico hace años se ha convertido en un complemento indispensable para un porcentaje enorme de los asistentes a festivales y cualquier tipo de jarana en general.

 

  • La Femme mola muchísimo (Jornada del jueves)

Por lo visto la formación francesa ha tenido más rotación de componentes que el cast de La Que Se Avecina, pero la esencia sigue intacta o incluso mejorada. Una maravilla de brisa marina que deberías contratar para tu chiringuito veraniego (e invernal) ahora mismo.

 

  • Brandon Flowers es Tom Cruise (Jornada del jueves)

Yanki, rostro impasible al paso del tiempo, sonrisa constante, más energía que el conejo de Duracell, perteneciente a un culto religioso indie, buenísimo en lo que hace y una maldita estrella. No busquen más, aquí tienen los sujetos Alpha de nuestro tiempo, clónenles y hagan una ejército de estrellas.

 

  • Guau, Parcels (Jornada del viernes)

Me encantaría poder completar un párrafo a la altura de lo que mis acompañantes y amigos sienten por este grupo, pero sus ansias de llegar a tope a este concierto han hecho que no recuerde nada. *Inserten palabras en comentarios sobre la joya de la corona del viernes, con permiso de Muse.

 

  • Florence es la próxima presidenta del universo (Jornada del sábado)

Pocos o ningún tema crean un consenso total, pues bien, lleven a extremos opuestos a un concierto de esta mujer, Guardiola vs Mourinho,  el Coyote vs el Corre caminos, Robe Iniesta vs Live Nation… y todos se maravillarán por igual. Brujería, dicen. Saluden a su reina.

 

La secta que podría liderar esta mujer podría conquistar la humanidad.

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Fotografía de Florence & The Machine

 

  • Guitarricadelafuente es igual de Guitarricadelafuente en directo (Jornada del sábado)

Saber que ese musicón no pierde ni un ápice en directo es una noticia magnífica, enorme presente y con muchas ganas de ver la evolución de alguien singular y con una oferta distinta. Una pena el corte de sonido en los minutos finales, el responsable de horarios y sonido del festival es un tipo implacable y con corazón de hielo, un tipo de acción.

 

  • Pixies: ¿Quiénes son esas? (Jornada del sábado)

Eso escuché decir a un chaval en los baños. Me divirtió bastante imaginarle pensando en una banda electropop de adolescentes con faldas de uniforme y llegar allí y ver a tremendos señores sin pelo, panza cervecera y una actitud de ROCK resbalante increíble gritando “Haaaay aviones cada hora…” con acento guirguiland.

Qué decir de ellos o de sus himnos, «maravela«, una pena que este artículo me destrozara «Where Is My Mind» y que al escucharla, en lugar de pensar en Leftovers o El Club de la Lucha me venga a la cabeza un tipo rollizo desnudo corriendo por un centro comercial.

 

  • Nathy Peluso, darlo todo hasta el final (Jornada del domingo)

El domingo llegaba como el día de la muerte, la última jornada del festival sólo estaba al alcance de aquellos valientes con fuerza sobrehumana (admiración eterna). La recompensa para ellos fue potente: Nathy Peluso, Jack White o Two Door Cinema Club o La M.O.D.A. marcaron el rumbo con conciertos llenos de vida. El de estos últimos lo definen ellos mismos como uno de los más importantes de su carrera. Por su parte, Peluso compartió al día siguiente una foto con la que podría identificarse la gran mayoría de asistentes al festival: el darlo todo tiene sus consecuencias.

 

Y hasta aquí el aporte sobre el festival de nuestra ciudad, motivo de orgullo año a año. Agradecimientos especiales al Caminante Juanito, este festival nunca hubiera sido lo mismo sin ti.

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Fotografía de HAIM