La que habría sido tercera edición del festival Cala Mijas se convirtió en la primera de Kalorama Madrid. Lo que es la vida. Sucedió el último fin de semana de agosto en IFEMA y aquí estamos para repasar lo sucedido.

Jueves, 29 de agosto

Kalorama Madrid 2024 comenzaba el jueves 29 de agosto con una jornada marcada por las dudas respecto al público asistente al festival. Si bien el día inaugural hubo menos que en las jornadas posteriores, especialmente en la del sábado, se puede decir que se cumplió con las expectativas respecto al número de asistentes. Siempre es complicado aterrizar con un festival en Madrid y más celebrándose durante el mes de agosto, pero visto con perspectiva, las sensaciones fueron buenas.

El recinto ofreció una comodidad total al asistente, sin apenas esperas en barras gracias a la buena distribución de las mismas por todo el recinto y con una zona de comidas bien situada a la entrada al festival, filtrando adecuadamente a las personas que hacían una parada en avituallamiento vs. los que iban directos a disfrutar de los conciertos. Lo mismo ocurrió con los baños, ninguna espera gracias a los diferentes puntos ubicados cerca de los escenarios.

En cuanto a la música, Kalorama Madrid abría con grandes nombres internacionales como The Postal Service + Death Cab for Cutie, The Kills, Nation of Language o estas dos bandas:

  • ¿El concierto de la jornada? LCD Soundsystem. Siempre fueron, son y serán un seguro de vida en directo. Y en IFEMA no podía ser menos. Brillante su directo repleto de hits.
  • ¿La joya que nadie debió perderse? English Teacher, recientemente ganadores del Mercury Prize al Mejor Álbum Británico del año. Afrontaron con solidez la siempre difícil tarea de abrir un festival.

lcd soundsystem kalorama madrid

A modo anecdótico cabe destacar que Harry Styles andaba por allí, como un asistente más, lo que hizo acaparar varios titulares al día siguiente. Algo evidentemente bueno para la organización, ya que aún quedaban dos días por delante.

 

Viernes, 30 de agosto

La segunda jornada, la del viernes 30 de agosto, fue la de la tormenta perfecta. El cielo comenzaba la tarde despejado pero poco a poco fue cerrándose y unos tímidos rayos se atisbaban en el horizonte, sobre todo después del concierto de Gossip, cuya energía había levantado al público del escenario principal. Bendita Beth Ditto. Unos minutos más tarde, mientras Yves Tumour asombraba con su cuidado directo, la tormenta del siglo estalló en IFEMA, obligando a suspender su concierto y el posterior, de RAYE.

Tal fue la fuerza de la tormenta que la organización tuvo que acordar con IFEMA el abrir uno de sus grandes pabellones cercanos para que buena parte del público pudiera refugiarse, ya que los pocos toldos y carpas que había por el recinto ya estaban al máximo de su capacidad.

Tras algo más de una hora de incertidumbre, el festival anunció a través de sus redes sociales que se reanudaría con los conciertos de The Prodigy y Overmono. Un doblete que hizo olvidar el agua a través del poder de la electrónica.

the prodigy kalorama madrid

  • ¿El concierto de la jornada? Yves Tumour. O al menos lo era hasta que estalló la tormenta, una pena que se viera obligado a recortar su setlist.
  • ¿La joya que nadie debió perderse? The Prodigy. Ver a la banda tras el tormentón del verano fue la paradoja más absoluta. Dicen que después de la tormenta llega la calma, pero lo que llegó fue su ristra infinita de pelotazos directos al mentón. Maravilla.

 

Sábado, 31 de agosto

El festival completaba el fin de semana con una última jornada que resultó ser la más multitudinaria. El reclamo de sábado + Massive Attack + Jungle era un trío al que era difícil resistirse, por ello la energía de IFEMA rebosaba ganas de vivir música en directo desde casi la apertura de puertas.

El tiempo respetó al recinto en esta ocasión, dando mucho sol a los primeros nombres en abrir los escenarios, Huda y Monobloc. Tras ellos llegaron dos absolutas joyas del panorama actual que ofrecieron un directo brillante de principio a fin: Ezra Collective y Olivia Dean. Ambos precedían al nombre de la noche: Massive Attack. No, no cancelaron, de hecho los británicos pudieron reconciliarse finalmente con el público de Madrid gracias a un directo que será difícil de olvidar. Lo suyo fue un show visual y musical a la altura de las mejores bandas del mundo. Pocos artistas en la actualidad son capaces de ser tan coherentes con sus valores y seguir sorprendiendo tanto a nivel melódico como visual. Un concierto de 10 que duró 2 horas y que podría haber durado 4 sin ningún problema.

Tras Massive Attack llegaron Jungle, cuyo directo no se quedó atrás en cuanto a brillantez. Están en el mejor estado de forma de su carrera y todo les sale redondo. Precedieron a Sam Smith, que cerró la programación del escenario principal antes de cederle el testigo a Peggy Gou para un cierre de lo más aclamado. Pocos DJs tienen la versatilidad y carisma de la coreana.

  • ¿El concierto de la jornada? Massive Attack. Posiblemente, con permiso de James Murphy y los suyos, el mejor concierto del festival.
  • ¿La joya que nadie debió perderse? Jungle. Desde triunfar en Glastonbury, pasando por el grupo más ‘famoso’ de tiktok hasta enamorar a Kalorama Madrid. Su trayectoria va a seguir acumulando éxitos, de eso no hay duda. Culpa de ello la tiene su espectacular directo.

Y así terminó la primera edición de un festival cuyo futuro aún no está del todo claro. Lo bueno es que aquellos que lo vivieron lo podrán guardar en sus mentes como un objeto de colección que aumenta su valor con el paso del tiempo.

¿Nos vemos en Kalorama 2025? ¿Habrá segunda edición del festival madrileño o volverá a mutar mudándose de nuevo al sur de España? El tiempo lo dirá, y allí estaremos para contarlo.

kalorama madrid