Los 10 mejores discos internacionales de 2015

Está bien esperar al penúltimo día del año para comenzar el repaso del mismo. Hay gente que se apresura en hacer las cosas, pero las prisas no son buenas. Para hacer una valoración, siempre es mejor tenerlo todo reposado y meditado. Así las ideas surgen fluidas, consecuentes, sin miedo al arrepentimiento.

Con esto llegamos para presentaros los que, a nuestro parecer, son los mejores discos internacionales del año 2015. La lucha ha sido feroz, ha habido auténticas joyas, expectativas que no llegaban a convertirse en realidad y estrepitosos fracasos. Un año con un nivel realmente alto y sólido. Podemos estar contentos con la nueva música surgida en los últimos 365 días.

Atentos, estos son, para Wake And Listen…

Los 10 mejores discos internacionales de 2015

 

Father John MIsty – I Love You, Honeybear

Tardará en olvidar 2015 el señor J. Tillman. Ha sido su año, el de su ascenso a los altares gracias a su I Love You, Honeybear, un disco repleto de clase. Como la suya. Porque los 12 temas que forman el disco son una colección de medios-tiempos para degustar mientras tomas una copa de vino blanco en una terraza veraniega junto al mar. «Chateau Lobby #4 (in C for Two Virgins)», «The Night Josh Tillman Came To Our Apt» y la propia » I Love You, Honeybear» son el trío de ases que cualquier oído querría mantener de por vida en sus entrañas, y no son los únicos. Las 11 canciones que completan el álbum son un compendio de melodías intensas, verdaderas y sinceras. Piano, cuerda, todo vale, pero con cuidado, con cariño, como solo el señor Tillman es capaz de hacer.

Cuando la música parecía haberse quedado sin caballeros, cuando parecíamos condenados a que el auto-tune se erigiera en la figura única e indestructible, llega Father John Misty para devolverte al lugar del que nunca deberías haber salido. A esas estructuras de canción clásica, revisadas en estribillos omnipotentes. Gracias, señor Tillman *By Ray Vegas

Sufjan Stevens – Carrie & Lowell

A veces, únicamente a veces, la música y los sentimientos consiguen unirse para conformar un “todo” inmenso. Probablemente suene algo frívolo o superficial decir que he empatizado con Sufjan o que he sentido su dolor, pero este disco me parece tan profundo que lo veo capaz de traspasar esa “frontera” invisible. Un trabajo muy muy personal que me ha hecho recordar viejos dolores, pero al mismo tiempo me alegraba al imaginar que otra persona los sentía y los podía transformar en algo hermoso.

“Death With Dignity” abre el disco. Un tema que entra gustosamente por nuestros oídos a la primera escucha. Cuenta únicamente con una guitarra quebrada y un piano que se incorpora a la voz de Sufjan, que canta una carta imaginaria a su fallecida madre. Le sigue “Should Have Known Better” en mi opinión, además de ser la mejor canción del disco, es uno de los mejores temas que ha escrito el estadounidense. Con un inicio sencillo, acaba empapado de suaves arreglos electrónicos y coros. Tras pasar por “All Of Me Wants All Of You” y ese riff que sigue a su estribillo llegamos a la dolorosa “Fourth Of July” en la que Sufjan, a manos de su piano narra el día en el que falleció su madre. A destacar también la deliciosa pieza folk que es “No Shade In The Shadow Of The Croos” que además cuenta con una letra que merece la pena pararse a analizar. El disco finaliza con “Blue Bucket Of Gold” de nuevo únicamente a manos de un piano. -*By Daniel Santamaría

Tame Impala – Currents

Corría el año 2011 cuando Tame Impala tocaban a primera hora de la tarde en el soleado escenario principal del FIB. Eran tiempos en los que menos de la mitad de la audiencia les reconocía. Mucho han cambiado las cosas en estos 4 años. Ahora, los australianos son auténticos ídolos de masas y son los cabezas de cartel que cualquier festival desearía. Su re-confirmación llegó este año con Currents, un álbum en el que dejan algo de lado su primitiva psicodelia para centrarse en un sonido más envolvente, repleto de teclados y una producción que atrapan desde su inicio con «Let It Happen».

En el viaje se entrelazan canciones que parecen no tener fin, «Same Old Mistakes» y pedacitos instantáneos de puro oro como «Disciples». Un álbum homogéneo, sin fisuras, que parece atraer a las últimas personas que se resistían al efecto Tame Impala. Quizás se echen algo de menos las melodías de InnerSpeaker, pero hay que reconocer el gran trabajo de Kevin Parker al mando de la instrumentación y la vuelta de tuerca, una vez más, a su sonido. Ahora es el momento de disfrutar del momento de Kevin Parker. El mundo es suyo, y se lo va a comer. *By Ray Vegas

Jamie XX – In Colour

El segundo disco de The XX me había dejado algo frío. No logró apenas entrar en mí, de la misma forma que lo había hecho su debut. Jamie, que forma parte del famoso trío, se lanza a una aventura en solitario, que en parte, coge la base de sonido del grupo, y le inyecta altas dosis de fina electrónica. En unas ocasiones de forma más animada, y en otras de forma más emocional. Un repaso a la electrónica de los últimos años.

“Gosh” prende la mecha inicial, abriendo con una base casi techno que muta hacia una fase emocional con un teclado que parece inspirado en Caribou. La siguiente es “Sleep Sound” o como hacer el remix más cool posible a partir de nuestro tono de despertador.

La llegada del sonido “XX” comienza con “Seesaw” donde otra integrante, Romy, pone la voz. Tema profundo y que explora terrenos más artificiales y distintos a los del grupo, pero que sigue sonando igual de emocional. En “Stranger In A Room” contamos con el único miembro que falta, Oliver. Y en esta ocasión el sonido si suena muy cercano, casi paralelo al del trío. Tras un par de piezas ambientales encabezadas por la genial “Obvs” llegamos a “Loud Places” donde la electrónica, coros góspel, y guitarrazos funcionan a la perfección con la voz de Romy. Uno de los temas del año. Para finalizar, nos empuja a la pista de baile con “I Know There’s Gonna Be (Good Times)” mezcla de bases con ritmos y voces reggae. Se pone punto final con la deliciosa “Girls”.

El disco de baile para todos los tímidos a los que no les gusta bailar. *By Daniel Santamaría

Ratatat – Magnifique 

Era necesario incluir su nuevo álbum en la lista. El dúo neoyorquino volvía a la actividad tras 5 años de parón y el público no las tenía todas consigo. Pero Ratatat tienen algo de lo que pocas bandas pueden presumir: tienen un sonido propio. Y no iban a dejarlo de lado en su nuevo trabajo. La instrumentación de sus canciones, sin voz alguna, suena a ellos. Son ellos, sin duda, los que hacen que «Cream On Chrome», sonando a todo volumen, te haga menear la cabeza de un lado a otro sin control. Son ellos los que te hacen levantarte de la cama de un salto cuando tocan «Abrasive» o «Pricks Of Brightness». Son ellos los que te hacen viajar a Hawaii con el ambiente de «Supreme» y «Drift». No hay duda, son ellos. Y que se mantengan fieles a ellos mismos es algo de agradecer en un mundo en constante cambio y que busca en todo momento «renovarse o morir».

Ellos han encontrado y demostrado que su sonido funciona. Es original, penetrante y no necesita de voces para emocionar. Disfrutemos de su Magnifique, que como su propio nombre indica, es uno de los 10 mejores discos de todo el año. *By Ray Vegas

Natalie Prass – Natalie Prass

La artista estadounidense ha sido una de las revelaciones de este año, y la verdad, me ha sorprendido no verla más arriba en las listas de lo mejor de este 2015. Su álbum, una obra de pop barroco que desprende azúcar y ternura. Tras leer esta descripción puedes haber pensado que el disco quizás se pase de dulce, pero la verdad es que todas las estructuras de las canciones están muy trabajadas y la mayoría de sus arreglos llegan a emocionar.

“My Baby Don’t Understand Me” inicia el camino, de forma sosegada, la voz de Natalie nos lleva a parajes llenos de nubes, las trompetas que acompañan los arreglos y a una suave guitarra hacen que el tema suene aún mejor. Continúa “Bird Of Prey” uno de los temas más delicados del disco, en el que consigue hacerme recordar vagamente a She & Him. “Your Fool” da más protagonismo al bajo y el estribillo llega entre palmas.

El centro del trabajo lo componen la elegante “Why Don’t You Believe In Me?” y “Violently” posiblemente la canción más compleja y con más capas de arreglos, mientras la voz de Natalie guía a toda la orquesta.
El punto final es “It Is You” que perfectamente podría formar parte de cualquier banda sonora de Disney. *By Daniel Santamaría

Cage The Elephant – Tell Me I’m Pretty

Su nuevo álbum, Tell Me I’m Pretty, generaba expectativas por dos razones: escuchar el sonido hacia el que se dirigía la banda y comprobar cómo funcionaba la producción de Dan Auerbach (The Black Keys). A Matt Shultz y los suyos les bastó con ir soltando single a single para saber que nos encontraríamos ante algo grande.

«Mess Around», donde se nota especialmente la mano de Auerbach, hizo los honores presentándose como el single líder. Le siguió «Too Late To Say Goodbye», que desprendía melodías de banda sonora de 007, pero fue «Trouble» la que definitivamente atrajo la atracción total de cualquier amante de la música. Una balada (casi) perfecta, letra y ritmo, que solo con su presencia hace ascender el álbum de los americanos hasta nuestro top 10 del año. Fijan el ascenso temas como «That’s Right» o «Cry Baby» *By Ray Vegas

Beach House – Depression Cherry

Tras la reseña completa del disco, quedaba claro que Beach House se iban a colar entre lo mejor del año.
¿Qué más puedo añadir? El dúo de músicos nunca falla y su trabajo me ha acompañado a lo largo del verano.

De gran profundidad, y tocando géneros desconocidos hasta ahora para la formación con la intención de aportar variedad al conjunto, Depression Cherry consigue mantenerme enganchado de principio a fin.
Thank Your Lucky Stars, su otro disco publicado en este 2015, también merecería entrar en la lista. De otro prisma, más oscuro e intimista, cuenta con el sonido característico del grupo, y lo lleva a terrenos más sombríos como en la excelente “Elegy To The Void” o partes donde el teclado tiene más protagonismo, véase “The Traveller”.

Dos discos realmente buenos. *By Daniel Santamaría

FIDLAR – Too

El grupo de garage más relevante del momento, con el permiso del señor Ty Segall, volvía en 2015 con las pilas cargadas y unas cuantas balas en la recámara. Publicaron Too con alguna de ellas. Pildorazos como «West Coast» o «Punks», que habían sido grabados años atrás pero nunca habían contado con una producción a la altura, entraron en las 12 elegidas. Un disco que destaca por su potencia e irreverencia. Siguen quejándose del mundo que les rodea, las guitarras distorsionadas mantienen su papel protagonista y los estribillos contundentes guían las canciones hasta un final placentero.

«Why Generation», la extremadamente original «Sober» junto a su pegajoso estribillo, y «Leave Me Alone» se llevan el pódium merecido. El próximo paso es que su directo llegue a España para que la locura colectiva se haga una realidad. *By Ray Vegas

Panda Bear – Panda Bear Meets The Grim Reaper

En 2016, Animal Collective publicarán nuevo trabajo, pero en esta ocasión, Noah Lennox, quizás el más popular de sus integrantes, regresa bajo el nombre de Panda Bear. Acostumbrado a entregar siempre buenos trabajos el listón estaba bastante alto, pero ha vuelto a sorprendernos con este trabajo de pop ácido y psicodélico.

Siempre he pensado que Animal Collective poseen el sonido que tendrían los Beach Boys compusieran hoy en día tomando LSD. En esta ocasión, se da una vuelta de tuerca más al sonido del grupo, y se consiguen unas canciones altamente lisérgicas, casi hipnóticas.

“Sequential Circuits” nos da la bienvenida y deja claro por donde van a ir los tiros del disco. Le sigue el paso “Mr Noah” uno de los temas más experimentales que mezcla estribillo pop con estruendos de electrónica y aullidos de perro.
Luego le llega el turno a “Boys Latin” una de las mejores canciones de pop psicodélico en los últimos años y con un videoclip tan inquietante como fantástico.
Con “Crosswords” llega la parte bailable y en “Tropic Of Cancer” se pone tierno baja muchas marchas para contar una lenta historia en compañía de un piano, al igual que en “Lonely Wanderer”.
“Acid Wash” acaba con la locura. Un disco tan loco como ácido. ¿Lo mejor? Que no hace falta estar drogado para disfrutarlo. *By Daniel Santamaría

Menciones especiales: Kendrick Lamar, Grimes, Courtney Barnett, Titus Andronicus, Tobias Jesso Jr., Unknown Mortal Orchestra y Oneohtrix Point Never.