El 17 de diciembre de 2009 iba a convertirse en un día histórico para la BBC. Ese día Rage Against The Machine pisaban los estudios centrales de la inmaculada cadena británica para interpretar «Killing In The Name«, tema que luchaba por alcanzar el nº1 en la lista de singles navideños.
Sí, así como lo estás leyendo. ¿Y cómo era posible que «Killing In The Name» pudiera alcanzar el nº1 en la lista de ventas navideñas de 2009 si se publicó en 1992 y no tenía nada que ver con la Navidad? Pues todo ello fue debido a una enorme campaña de marketing en contra del monopolio y dominio absoluto del programa Factor X en estas listas. Durante los 4 años anteriores todos los nº1 habían sido conseguidos por el programa capitaneado por Simon Cowell (el Risto Mejide inglés), y los amantes de la música comenzaban a estar molestos con el tema.
De esta manera, la campaña a favor de «Killing In The Name» creada por el británico Jon Morter y su mujer Tracy, empezó a ganar adeptos y las redes sociales echaban humo y soñaban con su posible nº1. Su máximo rival era Joe McElderry, ganador ese año de Factor X, y que calificó la canción de los americanos de «horrorosa». El cantante pop se mostraba optimista con la consecución de su objetivo.
Con todos estos precedentes, Rage Against The Machine se plantaban en los estudios de BBC Radio 5 para promocionar su tema aún más e intentar conseguir el Top1. Los jefes de la cadena no estaban para nada de acuerdo con la letra de la canción, repleta de «Fuck» sobre todo al final de la misma, por lo que llegaron a un pacto con Zach de la Rocha, Tom Morello y los demás miembros del grupo para que censurasen esa parte. Ellos, evidentemente, aceptaron. No podían perder la oportunidad de decir lo que pensaban y tocar su tema en la radio más grande de Reino Unido. Pero lo que la BBC no sabía es que Rage Against The Machine no permite ningún tipo de censura y no hacen caso a lo que les mandan.
Tras la entrevista pertinente, la banda comenzó a tocar «Killing In The Name» y todo parecía transcurrir con normalidad. Hasta que llegó la parte final de la canción. La parte original en el subidón final versa «Fuck you, I won’t do what you tell me» pero debido al conocido pacto, Zach de la Rocha solo podía articular «**** *** I Won’t Do What You Tell Me«. O eso creían los jefazos de la cadena. Tras una primera tanda sin nombrar la palabra «Fuck», la frase «No haré lo que me decís» era demasiado jugosa como para no seguirla al pie de la letra. Y sucedió. De la Rocha gritó «FUCK» más alto que nunca y con el dedo levantado en señal de desafío a la cadena. La BBC censuró el vídeo pero la banda lo veía venir y publicaron la versión sin censurar que puedes disfrutar arriba.
«Cortad eso«, interrumpió el presentador Shelagh Fogarty. «Lo siento, tuvimos que detener la grabación porque de repente se convirtió en algo que no esperábamos. Bueno, nos lo esperábamos, y les había pedido que no lo hicieran, pero lo hicieron de todos modos, así que compren el single de Joe.» El enfado del presentador era evidente pero qué más da. Fue una de los momentos más polémicos de la historia de la BBC, y será muy difícil de olvidar.
¿Conseguirían ser nº1?
La polémica y todo este revuelo ayudó aún más a la promo de «Killing In The Name». Cuando se publicó la lista de ventas navideñas, los resultados eran claros. «Killing In The Name» consiguió el número 1 superando en 50.000 copias a la canción de Joe McElderry. Por fin, buena música sonaría en la Navidad británica y una frase quedaba por encima de todo: «Fuck you, I won’t do what you tell me«.