Por Paula Pérez Miranda

Anoche la madrileña Sala El Sol se llenó de efervescencia, guitarras y saltos que formaban el combo perfecto con el que simbolizar lo que estaba sucediendo, la celebración del IV aniversario de Marilians Records, y que mejor forma de hacerlo que con música.

Las puertas abrieron a las 20:30 horas y dieron paso a cientos de pies que querían saltar y así lo hicieron, al ritmo de Mediapunta y Diamante Negro, dos bandas capaces de crear un ambiente de diversión al instante y que abanderan de manera emergente la escena actual del pop-punk español con un toque underground.

Abrieron la noche los zaragozanos Mediapunta, arrancando con la intro de la cómica serie The Office y «Tumbados». Un comienzo idóneo para coger impulso y levantarse haciendo vibrar la sala tanto con «Vaya tarde de calor», uno de sus últimos lanzamientos, como con su gran tema «Fantasmas», que comparten con Diego Ibáñez de Carolina Durante. Aunque en esta ocasión lo hicieron con Benoit García, voz, bajo y guitarra de Diamante Negro, fundiéndose en una energía incontrolable que llenó hasta el último rincón de La Sol de pogos y brindis en loop.

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Y así se mantuvo la actitud durante toda la noche, siguiendo con el turno de los barceloneses Diamante Negro, quienes también sumaron invitados al escenario, como la artista urbana Anouck y el cantante del grupo Punketón Pop Alavedra, con quien hicieron la simbiosis perfecta al cantar «Sale Mal», el tema que comparten y que se ha convertido en un gran hit.

Siguieron con su famoso «Club Caribe» y cerraron la velada con «Futuro Incierto», algo que no podía representar mejor la sensación permanente en el ámbito musical, en proyectos culturales como el de Marilians y en el sentimiento que queda cuando termina una noche tan eufórica.

Sin duda, un cumpleaños lleno de garra y rock en el que el deseo al soplar las velas es que el año que viene haya un V aniversario y mucha más música.