Por Guillermo Jurado
Con su cuarto disco bajo el brazo, alt-J visitan de nuevo España este noviembre, y en Wake And Listen hacemos un repaso por su discografía.
En pleno apogeo de lo hípster, la banda británica, formada en Leeds, ya dejaba caer contundentemente que ellos eran los más alternativos. Sacaron su primer EP Films bajo el mismo seudónimo, pero por motivos legales, tuvieron que cambiar de nombre y eligieron alt-J, que viene de pulsar en un teclado Mac la secuencia “alt+J” dando el resultado del símbolo Δ, su nombre real.
El debut, An Awesome Wave
Y es que, el por entonces cuarteto, hacía muchas alusiones a triángulos, y lo iba a llevar al extremo. En la primera mitad del 2012 lanzaron An Awesome Wave, y su portada es una foto aérea del mayor delta del mundo. En Tessellate ya cantaban “triangles are my favorite shape”. Y quizás, por eso, cuando Gwil Sainsbury abandonó el grupo tras llegar a la fama con su primer disco, no quisieron buscar un remplazo, quedando el trío que pudimos ver en el Mad Cool este verano.
Su álbum debut les valió los premios Ivor Novello y Mercury (uno de los premios musicales más prestigiosos) a mejor disco del año, que funcionó como un trampolín al éxito global. Para finales de 2012, alt-J habían llegado a la posición número 13 en las listas de éxitos de Reino Unido, y habían duplicado sus ventas. Su música innovadora les valió comparaciones con Radiohead e incluso Pink Floyd, así como parodias y memes. Actualmente, su disco cuenta con casi un millón de discos vendidos, y es uno de los discos alternativos más escuchados de la década.
En 2014, ya como trío, anuncian su segundo largo: This Is All Yours. Este álbum les consolida como banda de primera línea, posicionándoles directamente en el número 1 de las listas y obteniendo su primera nominación a los premios Grammy.
En línea con su modernez característica, la portada del álbum era una pintura que Thom (batería) había hecho en la universidad, y su primer sencillo, Hunger of the Pine, contenía un sample de Miley Cyrus. Y es que es en This Is All Yours donde encontramos sus primeras colaboraciones con otros artistas, como es también el caso de Marika Hackman en Warm Foothills.
Además, gracias a la popularidad que habían obtenido, alt-J encabezaron una de las jornadas del Primavera Sound en 2015, así como otros festivales a nivel mundial.
Ya ha quedado claro que Joe, Gus y Thom son un poco frikis, y en marzo de 2017, se iban a superar: anunciaron el primer sencillo del tercer disco, Relaxer, con un audio en código binario que decía “00110011 01110111 01110111” (3ww). El disco fue anunciado tres meses antes, el 3/3, y se lanzaría el 9/6, jugando de nuevo con los múltiplos de 3 (Δ). Además, lanzaron un videojuego online con estética vintage con su música como banda sonora.
Relaxer, su 3/3
En Relaxer encontramos, de nuevo, la voz de Marika Hackman e introduce la de Ellie Rowsell de Wolf Alice, en su primer single. También aparece una adaptación de una melodía de La delgada Línea Roja de Hans Zimmer en Adeline y una reinterpretación de House of the Rising Sun de The Animals.
El tercer disco de alt-J tuvo críticas mixtas, y aunque quizás no tuvo la misma acogida de los dos anteriores, les brindó una nueva nominación a los premios Mercury y la oportunidad de trabajar con diferentes artistas de otros estilos, creando una versión alternativa del álbum titulada Reduxer.
Y, tras 5 años de silencio, llegamos a 2022.
A lo largo de su discografía, encontramos en sus letras referencias y guiños a libros, poemas, eventos históricos, ciudades, películas, personajes, sexo, drogas, cantos en japonés y en código binario…, pero es con The Dream donde llega el culmen de esas historias. En su cuarto disco, se centran en el imaginario americano relatando crímenes reales, historias de Hollywood y del Chateau Marmont, junto, por primera vez, con experiencias personales.
De nuevo, encontramos en The Dream una reinvención de su sonido. Es quizás, su álbum más oscuro y a la vez más optimista. Canciones como la operática Philadelphia, la mezcla de actualidad con nostalgia en Hard Drive Gold, el sonido techno en Chicago, el amor adolescente en Powders y el duelo en Get Better, e incluso una contestación al Hey Joe de Jimmy Hendrix en Happier When You’re Gone.
Un álbum que sólo alt-J podría haber escrito.
El trío de Leeds pasará por Barcelona el 14 de noviembre en el Sant Jordi Club, y un día más tarde, pisarán el Wizink Center, en Madrid.