Fotografía by Javier Bragado

Crónica by Ray Vegas

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Lo de Morgan no es habitual. No es habitual escuchar a una banda que en directo mejora el sonido del estudio. No es habitual que sus canciones despierten tantos sentimientos en el público que las admira. Puedo afirmarlo con conocimiento de causa. Asistí a la primera fecha (las dos agotadas) de Morgan en La Riviera con dos personas. Esas dos personas, en canciones diferentes, no pudieron evitar las lágrimas debido a la emoción que les evocaba la voz de Nina de Juan y las historias que contaba.

Esa emoción que despierta Morgan se debe a varios factores. Uno de ellos ya lo he comentado: la voz de Nina. La calidez, a veces rota a veces poderosa, de su voz entonando canciones en inglés y castellano es un torbellino que se introduce directamente por el oído hasta lo más profundo del cerebro. En La Riviera, al comienzo y al final, desprovista de micrófono, Nina se batió a pelo contra la sala madrileña. Y ganó. En un acústico formado por tres voces, La Riviera asistió totalmente en silencio a aquella maravilla de la naturaleza.

En esos dos momentos de aquel viernes, 14 de diciembre, a Nina le acompañaban Paco López (guitarra y voz) y Alejando Ovejero (bajo), otros dos de los factores responsables del éxito de la banda junto a Ekain Elorza (batería) y David Schulthess (batería). Juntos forman una de las bandas más brillantes a nivel instrumental del panorama nacional. Hace un año pudimos comprobarlo en directo en su concierto en el Circo Price y el pasado fin de semana volvimos a confirmarlo en La Riviera. Esa brillantez instrumental, sumada al carismático liderazgo de Nina al piano, forma un combo que ya se ha asegurado un merecido hueco en la historia de la música de nuestro país.

 

 

Su concierto en La Riviera fue lo que cualquier fan de la banda podría esperar. Una joya para los oídos en la que se entrelazaron solos de guitarra infinitos con alma de Pink Floyd, baladas directas con estructuras perfectas y canciones con esencia funk que pusieron en movimiento a toda la sala. Una variedad de géneros y estilos que convierten a Morgan, lo apunto una vez más, en una de las bandas más completas de España. Disfrutar de su directo no es un derecho, es una necesidad.

– Por cierto, en 2020 tienen algunos conciertos. Si tienes la oportunidad de ir a alguno de ellos, no la desaproveches –

Cuando terminen sus últimos conciertos, Morgan se tomaran un descanso para ponerse a trabajar en su tercer disco. No volverán a tocar en directo durante una temporada, pero cuando vuelvan con nuevas canciones, el público les estará esperando con los brazos y los oídos bien abiertos. Porque Morgan es una de esas bandas a la que hay que cuidar, una banda que sólo traerá alegrías a los amantes de la música.