1 de marzo de 1994. Nirvana se subían al escenario de la Terminal 1 de Munich para dar el último concierto de su historia.
Nadie pensaba que ese sería la última actuación de su carrera. Aún les quedaba alguna fecha de su tour europeo, incluidos otros 2 conciertos más en Alemania, pero a Kurt Cobain le fue diagnosticado una fuerte bronquitis y laringitis, por lo que tuvo que marcharse a Roma a iniciar el tratamiento y no les quedó más remido que cancelar la gira.
La banda comenzó su concierto en Munich con «My Best Friend’s Girl» una versión de The Car. La voz de Cobain ya empezaba a mostrar signos de flaqueza, sobre todo cuando tuvo que enfrentarse a «Drain You». En el setlist no faltaron «Come As You Are» o «Smells Like Teen Spirit», 6º y 7º tema de la noche. El concierto duró 80 minutos, el más corto de la gira europea. Aún así, los fans alemanes del grunge quedaron encantadados.
3 días después, el 4 de marzo, Kurt entró en coma tras haber ingerido una mezcla accidental de Rophynol (un tranquilizante) y Champagne. Fue llevado al hospital a que le realizaran un lavado de estómago, y al día siguiente consiguió recuperarse y salir del coma.
Ese momento fue el comienzo de su cuesta abajo. Alguien tuvo que darse cuenta. Pero un mes después, el 4 de abril, el gran ícono del grunge murió. Y nació su leyenda.