Tras recibir a La Habitación Roja hace ya casi un mes, León volvía a tener una cita imprescindible con lo mejor del panorama nacional.
Tras los himnos pop del grupo valenciano, tocaba moverse por unos terrenos más oscuros e inexplorados, dado que Toundra es un grupo que gira con no demasiada frecuencia.
El escenario, inmejorable. La cita era de nuevo en el Espacio Vías, que ha logrado convertirse en el principal icono de actividades culturales de esta ciudad.
Esta vez el prisma era diferente. Esa sensación especial que produce estar en la víspera de Hallooween, y el contraste que un grupo oscuro puede ofrecer para mezclarse en una misma noche.
Sobre las diez de la noche aparecieron los teloneros Pure, naturales de León. Durante algo más de media hora pudimos disfrutar de sus temas, además de la introducción de dos canciones de su nuevo material. A pesar de no contar con el mejor sonido, y un bajo que apenas se escuchaba, sacaron a escena un repertorio bastante variado, y lograron calentar al público.
Algo más tarde de las once las luces se apagaron, y se comenzó oír el canto de unos pájaros. Sin duda se trataba del inicio de “Strelka”.
Los madrileños aparecían, y contaban con el mejor sonido posible, alto, potente, rotundo y ante todo muy envolvente.
Ellos comentan que su nuevo álbum “IV”, narra la historia de dos zorros intentando huir de un incendio en pleno bosque. Y lo que queda claro, es que su inicio es una de las mejores composiciones del “post rock” de este año.
El concierto siguió avanzando, seguido, sin ninguna pausa. Pudimos ver algo más de su lado “metalero” con temas de anteriores trabajos como “Marte”. A destacar también de su último LP “Belenos” que nos guió hacia un épico final de la mano de “Oro Rojo” y “Bizancio”
El público estuvo muy metido en el concierto desde los primeros acordes hasta la gran distorsión final. Mención especial también para el juego de luces, muy acertado, y que dotaba de una epicidad extra al concierto.
Hora y media después del inicio, Toundra se despiden, el sonido y la distorsión cesan poco a poco. El público comienza a abandonar el recinto y una cosa muy clara asoma en sus mentes: Toundra son uno de los grandes referentes dentro del post rock de nuestro país.