Este noviembre es, sin duda, un gran mes en cuanto a la agenda de conciertos que tiene Madrid. Otra cita indispensable es la que tiene lugar el 19 en la sala Ochoymedio para despedir la gira de Airbag, esa banda que podría ser un cóctel molotov entre el punk originario de los 70, el pop-rock y el surf . Los malagueños dirán adiós al eterno recorrido de presentación de Gotham te necesita (2015), pues los hemos conocido en permanente viaje, acompañados por Los Bengala, que ya lo bordaron la capital con un sold out el pasado septiembre en la Wurlitzer. Nacidos a finales de los 90, los de Estepona se caracterizan por nunca haber salido del panorama más alternativo del rock español, incluso cuando éste no estaba de moda. Con letras peculiarmente divertidas por ser infantiles y sencillas, llenas de referentes cotidianos pero que exigen las vivencias de cierta generación cada vez más lejana, se particularizan por una falta de trascendencia que denota sus intenciones más desenfadadas y festivas con la música.
Compartir cartel junto al grupo maño en cuestión es, por otro lado, muy gamberro. Y es que este dúo felino – así les gusta autodenominarse- lo es, entre otras cosas, por haber prescindido de bajo, aunque en el pasado directo ofrecido en Madrid fueron tres, a modo de excepción, por por el brazo roto de Borja Téllez, batera y voz. Ambas bandas son primos hermanos de lo transgresor y guerrillero del panorama nacional, caracterizados por una fuerza innata que no busca nada más que la gente sude y zapatillee durante sus directos. No obstante, cabe decir que en aquí los veteranos son los primeros. Con nueve discos y siempre en carretera, Airbag ha sido una banda de esas auténticas que nunca se han vendido ni de puertas para fuera pero tampoco de puertas para dentro. Con una marca muy personal, a este trío de colegas de ciudad pequeña les ha valido su público porque éste siempre les ha sido fiel, mientras paralelamente han desarrollado otro tipo de proyectos creativos como es el caso del libro recién publicado de Adolfo Díaz, Amor y ciencia ficción, una obra de formato caleidoscópico donde podemos encontrar desde notas autobiográficas hasta reseñas de CD’s que permiten entender su proyecto con el grupo.
Eso no significa que los autoproducidos Bengala tengan que envidiar a los sureños algo que no sea en cantidad de años y LP. Todavía con un proyecto acabado de despegar, son un éxito prolífico y canalla que, con los mínimos recurso, consiguen una explosividad brutal. Fuente de energía inagotable, llaman al grito desinhibido y descontrolado de un modo algo más hardcore y menos refinado que sus compañeros de escenario, donde sus coros en vez de obedecer a voces rascadas responden a una tiempos perfectamente sincronizados muy Ramones. Pero lo más curioso de todo quizá haya sido el hecho que los de Zaragoza solamente hayan necesitado de un primer y único CD, Incluso Festivos (2015), que ya va por la segunda edición, para tener tanto poder de convocatoria dentro de la escena de garaje rock español, donde cada vez es más difícil hacerse un hueco. Así pues, no cabe duda que este doble concierto promete ser un evento con un listón muy alto que requiere, sobretodo, mucha garra. Pues no es tan fácil pillarles.
By Andrea Genovart