Sinceramente, desde Wake And Listen, esperamos que no haya llegado el momento en tu vida en el que tengas que plantearte lo de tu herencia.
A quién y de qué manera dejar tus bienes son cuestiones lutctuosas y postreras* que distan del buenrollismo que caracteriza a nuestro artículos.
*Quizá solo haya algo peor: no tener nada ni a nadie a quien dejar tu nada.
Por eso este artículo (una vez más, esta vez por tu bien) no versará sobre ti, sino sobre la gran incógnita que inquieta a nuestras chismosas y morbosas mentes:
¿Quién heredó la fortuna de nuestras estrellas del rock cuando murieron?
JOHN LENNON
Como todos sabemos John Lennon, aparte de decorar la pared de la mayor parte de locales que se hacen llamar alternativos en este planeta, también fue miembro de la banda más popular de todos los tiempos: The Beatles.
Julian Lennon, su primer hijo, con Cynthia Powell en 1963, fue el que peor parado salió con esto de la herencia de un papi icónico. Yoko Ono no solo disolvió a los Beatles*, me temo que también el matrimonio de la mami y el papi de Julian.
*Sabemos que hay gente que cuestiona este hecho, así que, tranquilos, solo citamos el famoso himno de Def Con Dos.
Así que cuando, en el 75, llegó Sean Lennon, el hijo de John y Yoko, papi no tardó en perder el contacto con su primer hijo.
Ahora sabemos que el patrimonio de John estaba valorado en 220 millones de libras cuando falleció y que el pobre de Julian fue dejado fuera del testamento.
«Papá podía hablar de paz y amor en voz alta al mundo, pero nunca pudo exhibirlo a los que presumiblemente significaban más para él: su mujer y su hijo», llegó a decir Julian en una entrevista para el Telegraph.
Para recibir una parte de toda la pasta que dejó su padre Julian tuvo que escribir una canción que conmoviera el negro corazón de… no, es broma, Julian tuvo que emprender acciones legales. Es lo que se hace en estos casos.
En 1996, llegó su recompensa, un acuerdo del que Julian no ha querido revelar la cantidad exacta.
Pero la verdadera “beneficiada” de todo esto fue Yoko*, que era la albacea de la herencia de John y, a día de hoy, sigue teniendo la mayor parte de los bienes de John. Sabemos que recibe 12 millones de dólares anuales por derechos de autor y por la explotación de la imagen de su Lennon.
*We love you, fucking Yoko.
FREDDIE MERCURY
La reina entre las reinas*, Freddie Mercury, falleció en 1991 como consecuencia de las complicaciones de una neumonía relacionada con el sida. Tenía entonces 45 años.
*Por mucho que le pese a Isabel II. Ya exánime.
Mercury estaba comprometido con Mary Austin, a la que había conocido cuando ella tenía 19 y él 24.
Después de seis años, la relación llegó a su fin cuando él se declaró abierta y poderosamente gay. A pesar de ello, Austin y él se mantuvieron unidos durante el resto de su vida.
De hecho, ella recibió la mitad de las ganancias previstas cuando Mercury murió*.
*Así como una enorme propiedad en el oeste de Londres, con 28 habitaciones y muebles antiguos.
La hermana y los padres de Mercury recibieron la otra mitad, que se dividió a partes iguales.
Con respecto a las ganancias totales de la banda, Queen, ella posee un 19%, mientras que el 80% restante se divide entre los antiguos compañeros de Mercury: Brian May, Roger Taylor y John Deacon.
*No hace mucho Mary Austin también ha recibido 75 millones de dólares más en concepto de derechos de autor por la recién estrenada y exitosa película de Queen, «Bohemian Rhapsody».
KURT COBAIN
El ángel grunge, Kurt Cobain, cantante, compositor y guitarrista de Nirvana, se suicidó en 1994 a los 27 años.
Kurt había bregado durante años contra la adicción y el masoquismo lo que le hizo tener muy en mente lo de dejar testamento.
Los tribunales determinaron que su pareja Courtney Love y su hija Frances Bean Cobain recibirían su herencia económica.
Love fue nombrada albacea* y recibió el control de los derechos de Kurt, que según Business Insider tenían un valor total de 245 millones de dólares.
*No la veo ni como trilera en la puerta del metro, imagínate de albacea.
Su hija recién nacida recibió un 37% de la fortuna, que en 2014 estaba valorada en 450 millones de dólares.
Frances Bean ha admitido que la cantidad de dinero que heredó la hizo sentir incómoda, que lo consideraba inmerecido y que llegaba por parte de un total desconocido, un muerto que nunca llegó a conocer.
*Mensaje para Frances: Él tampoco te conoció a ti, pero te quería mucho.
JIMI HENDRIX
El bueno de Jimi no tuvo descendencia y falleció sin dejar testamento*, por lo que su padre, Al Hendrix, quedó a cargo de la administración de su patrimonio.
*Una cosa que debería ser normal para un jovencito.
Tras el fallecimiento de Al en 2002, su hija adoptiva Janie Jinka se hizo cargo de las finanzas de Hendrix y del uso de su nombre. Y comenzó el jaleo.
En 2004, Leon, el hermano menor de Jimi, intentó supuestamente impugnar el acuerdo solicitando una parte de la herencia, pero una decisión judicial de 2007 dijo que el testamento de Al se mantendría, y que la herencia, así como la autoridad para comercializar productos con la marca Hendrix, seguiría perteneciendo a Jinka.
A pesar de ello, Leon siguió explotando el negocio de Hendrix, no fuera a quedarse si nada el carroñero.
En respuesta, Jinka presentó una demanda y en 2015 se dictó una orden judicial que prohibía a la empresa de Leon utilizar marcas registradas con la imagen y el nombre de Jimi Hendrix.
A día de hoy todavía andan en trifulcas. Ninguno de ellos ha aprendido a tocar la guitarra para granjearse una fortuna por su cuenta.
DAVID BOWIE
David Bowie falleció en Nueva York a principios de 2016 a la edad de 69 años a causa de un cáncer de hígado, poco después del lanzamiento de su último álbum, «Blackstar.»
Su mujer y sus dos hijos recibieron una parte a partes iguales de su cuantioso patrimonio, unos 230 millones de dólares.
Duncan y Alexandria, los hijos, tienen derecho a recibir cada uno el 50% de los intereses tras el fallecimiento de Iman.
El músico también entregó a Corinne Schwab, su secretaria, 2 millones de dólares y sus acciones en la empresa Opossum Inc, así como 1 millón de dólares a la antigua niñera de su hija la que, joder, espero que se sienta muy afortunada.
JANIS JOPLIN
A lo largo de su carrera, la famosa lupas del rock, Janis Joplin luchó contra el abuso de sustancias, por lo que, a diferencia de varios de sus amigos del Club de los 27, se olió la sobredosis de heroína y preparó su debido testamento a tiempo.
En el momento de su muerte, 1970, acumulaba un patrimonio de 250.000 dólares, que, si tenemos en cuenta la inflación, tendría un valor actual de 1,7 millones de dólares.
De esta pasta legó a sus hermanos Michael Joplin y Laura Joplin una cuarta parte de sus bienes y a sus padres, Dorothy y Seth Joplin, la otra mitad.
Los hermanos de Janis, que son tan majetes y diligentes como ella, han compartido la responsabilidad sobre su herencia desde que sus padres fallecieron. Aprueban iniciativas especiales y supervisan las declaraciones de derechos de autor personalmente.
No sé por qué pero me parece duro contar que, a lo largo de los años, han ganado más dinero con las canciones de Janis que el que ella misma pudo conseguir en su breve vida y carrera.
BOB MARLEY
Más rastafari que Haile Selassie, la marihuana y el bobsleigh juntos, Bob Marley falleció en 1981, a los 36 años.
Estaba casado con Rita Anderson, pero ambos mantuvieron varios romances extramatrimoniales. Tan extramatrimoniales que, de varias parejas, nacieron como 11 ó 12 hijos.
*La Camada Marley.
Como Bob Marley no tenía testamento*, su herencia se dividió a partes iguales entre su mujer y todos sus retoños, dejando a Rita, madre de cuatro de sus hijos, con sólo el 10% de los bienes del cantante.
*No le pega preocuparse de esos asuntillos.
Después de luchar por una parte mayor de los bienes de Marley, ella y sus hijos acabaron recibiendo el uso exclusivo del nombre y la imagen de Marley como parte de un acuerdo judicial.
*Yo tenía una carcasa intercambiable de Nokia con el careto del rasta. Imagino que financié a Rita y a los suyos.
Desde entonces, la familia Marley ha protegido, con garras y dientes, la identidad y la reputación del cantante, hasta el punto de que el hermanastro de Bob, Richard Booker, fue recientemente atacado legalmente por la familia por utilizar el nombre de su hermano en vano, al organizar conciertos y viajes.
JOHNNY CASH
Johnny Cash falleció en 2003 como consecuencia de numerosos problemas médicos*.
*Básicamente estaba viejo.
Tras una carrera que abarca seis décadas, su fortuna personal estaba valorada en 100 millones de dólares.
A John Carter Cash, hijo de su segundo matrimonio con June Carter, le legó la mayor parte.
Sin embargo, cada una de sus hijas sólo recibió un millón de dólares, tal y como se recogía en el testamento.
Para obtener una herencia mayor de su padre, tomaron la decisión de presentar una demanda contra su hermanastro.
En ella quedó patente su intento de cobrar los derechos de autor de la conocida canción «Ring of Fire», de la que John tenía los derechos de autor en exclusiva.
La demanda de las hermanas Cash no tuvo éxito.
ELVIS PRESLEY
La situación financiera del Rey era un desastre cuando falleció en 1977.
Elvis acumuló una importante cantidad de deudas como resultado de su desestabilizada carrera musical y cinematográfica. Años de mala gestión financiera y de malas decisiones empresariales tomadas por su mánager, el coronel Tom Parker.
Su herencia sería gestionada por los miembros de la familia que había nombrado en su testamento, entre ellos su padre Vernon Presley, su abuela Minnie Mae Presley y su hija Lisa Marie Presley.
En la actualidad, Graceland, el antiguo hogar de la leyenda del rock, sigue siendo propiedad de Lisa Marie y de su madre, Priscilla Presley, que también era la ex esposa de Elvis.
*Ya sé que todo esto del testamento de Elvis les vale madre a aquellos conspiranoicos que creían que Elvis sigue vivo. Pero bueno, ya quedan pocos, la mayoría de ellos también están muertos ahora mismo (o… no…).
JIM MORRISON
Otro del popular Club de los 27 y otro amortajado por sobredosis.
Tranquis, dejó un testamento, aunque breve.
A lo largo de unas increíbles… dos páginas, especificó que su amante, Pamela Courson, recibiría sus posesiones, así como un 25% de la propiedad de The Doors.
Los padres de Morrison seguían vivos, pero ellos y su hijo tenían una relación tensa y ya no se hablaban.
La familia del músico luchó por el derecho a una parte de su patrimonio, que más tarde resultó ser millonario*, alegando que la capacidad mental de su hijo se había visto mermada por años de abuso de sustancias.
*Debido, sobre todo, a que era el puto cantante y letrista de The Doors
“La gente tiene más temor a la muerte que al dolor.
