guadalupe plata 2017

Guadalupe Plata es uno de esos grupos que no necesita sacar un nuevo disco para justificar una gira o para llenar una sala. La peculiaridad de este trío de Úbeda, una banda de pocos referentes que se le asemejen en el panorama nacional, hace que no se necesite motivo para ir a verlos. Sin apenas ningún tipo de feedback con el público, algo que se puede intuir con la primera escucha de la banda, los directos son prometedores por espectaculares. Y con ello no se pretende apuntar a un show que recordar por su excentricidad sino a un repertorio tocado sin parar que te atrapa en su propio tempo. Con ya cuatro LP bajo el brazo, que mantienen esa relación fidedigna con un proyecto que sin verse transformado sólo hace que mejorar, llegan este sábado 29 de abril en la Sala But de Madrid. El pasado 21 de este mismo mes sacaron su nuevo disco, del cual ya teníamos un primer avance con su single; diez canciones que, como no podía ser de otro modo, están recogidas bajo ese título homónimo. Al final, compartir titular es inmortalizar un tiempo que para este tío, gracias a dios, no pasa. Y es por ello que Guadalupe 2017 y, lo que nos viene encima su concierto de presentación, será como mínimo lo que esperábamos.

Un sonido oscuro y grandes partes instrumentales; poca letra, un contenido escueto y anecdótico. Su single “Qué he sacado yo con esto de quererte”, versión de Violeta Parra, como tantas populares que han hecho, refleja lo que es el sello Guadalupe Plata: una mezcla emtre la ironía y el personalismo más serio que permite que, todo tema interpretado, sea o no de su propia creación, se vea influido bajo la estampa de su post rock. Con todo el tiempo del mundo, sin contar con las expectativas de nadie. Por un lado, la formalidad más ruda y fría; por otro, el sarcasmo relativista. Esa es la mezcla que lleva condensada toda pieza, que cuando es interpreyada en directo no puede dejar de llamar la atención sobre sí. Su último LP es una vuelta de todo esto que desde el 2015 no volvíamos a tener noticias, aunque encontramos que existe una mayor cantidad de canciones con ritmos más rápidos y de durada más corta. Que ya es decir. Y es que sí en algo se puede estar de acuerdo es que para los sureños tomarse sus minutos para lanzarse a ver cómo suenan sus partituras, posibles por la complicidad de la banda, es algo que tienen por la mano y que eligen deliberadamente. Algo, sin duda, necesario en su camino trazado.

Su directo, y por supuesto su repertorio, es ejemplo que sí puede hacerse la música por la música, desde y para ella; el fin de la de los de Guadalupe, y nos atrevemos a decir que así siempre ha sido, es reafirmar este blues de vanguardia donde ellos son meros auxiliares que permiten, bajo el manejo incansable de los instrumentos, que las composiciones sean las verdaderas protagonista. ¿Nos obligan a ser contemplativos? Quizás. Pero pocas veces, menos hoy en día, tenemos ese privilegio de serlo. Y este sábado se nos brindará de nuevo la oportunidad.

Entradas en Ticketea.


By Andrea Genovart